sábado

¿QUO VADIS, NAVIDAD?

  
La Navidad es una festividad religiosa que, en buena lid, solo deberían celebrar quienes creen en el misterio de la resurrección del Cristo. Porque sin la fe en Su victoria sobre la muerte, la existencia terrenal de Jesús de Nazaret no sería verdaderamente transcendente para la humanidad.

Soy de los que piensan que para reunir a la familia alrededor de una mesa y desearle felicidad a los amigos vale, y debería ser siempre así, cualquier día del año. Celebrar la Navidad es otra cosa: es recordar al Cristo y, sobre todo, a su mensaje de amor al prójimo.

En esta Navidad quiero pedirle a ese Creador cuyo rostro nunca he visto y al que apenas intuyo en el fondo de mi corazón que no se olvide de los humildes, de los oprimidos, los expatriados, los presos, de los que tienen hambre y sed de justicia en este mundo. A levantarles a ellos vino Cristo a la tierra, y quien lo dude debería leer los Evangelios con los ojos bien abiertos.

lunes

ONCE AÑOS

Cuando llegué a Vigo, hace once años, este abeto era un arbolito navideño que alguien prefirió plantar a arrojarlo en el contenedor de la basura


  Y Diego ni siquiera constituía un lejano sueño en la mente de sus padres
 
Un árbol y un niño pueden ser la mejor manera de resaltar lo bueno que puede traer consigo el paso del tiempo.
Todo lo que hagas con el corazón crecerá y dará fruto  a su tiempo, aún cuando nunca llegues a saberlo.